Hoy cedemos nuestro espacio a Valentina, una estudiante de Weston, de origen venezolano, quien realizó una hermosa exposición sobre el Mes de la Hispanidad, contada a través de nuestra amplia y deliciosa gastronomía.
Disfrútenlo:
“Hoy quiero hablarles sobre cómo celebramos el Mes de la Hispanidad a través de algo que todos amamos: la comida.
Me emociona compartir con ustedes la manera en que la gastronomía hispana no sólo es sabrosa, sino también es un reflejo de nuestra cultura, diversidad y tradición.
Además, les voy a contar cómo los platos que tanto disfrutamos en casa son, en realidad, un puente que conecta a toda Latinoamérica.
MES DE LA HISPANIDAD, UNA CELEBRACIÓN A TRAVÉS DEL SABOR
El Mes de la Hispanidad celebra la diversidad de las culturas hispanas desde el 15 de septiembre hasta el 15 de octubre.
Durante este tiempo, las familias y comunidades hispanas que vivimos en los Estados Unidos y en todo el mundo nos reunimos para honrar nuestra herencia cultural.
Y, como no podría ser de otra manera, lo hacemos en torno a la comida.
Comer en familia y compartir la mesa es algo fundamental en nuestras tradiciones, pues los platos que pasamos de generación en generación se han convertido en símbolos de nuestras raíces.
Pero lo que más me gusta es que, aunque cada país tiene sus propios platos y formas de prepararlos, hay muchas recetas que compartimos en toda América Latina.
A continuación, algunos de los más ricos ejemplos:
DISFRUTA DEL MES DE LA HISPANIDAD CON NUESTROS PLATTERS...
¡ORDENA AHORA!
TEQUEÑOS: El rey de las fiestas venezolanas
Si hay algo que no puede faltar en ninguna reunión venezolana, son los tequeños.
Estos deliciosos deditos de queso envueltos en una masa crujiente son el pasapalo perfecto.
Su historia se remonta a la ciudad venezolana de Los Teques, de ahí su nombre, y hoy en día, son un clásico que ha cruzado fronteras.
Ya no solo se disfrutan en Venezuela, sino también en muchos otros países donde las comunidades venezolanas han llevado este plato.
Ya sea en una reunión familiar, en una fiesta o en una comida rápida con amigos, los tequeños siempre están ahí para hacernos sonreír.
AREPAS: Más que pan, un símbolo de unidad
Otro gran representante de la comida venezolana e hispanoamericana, es la arepa, que es tan versátil como sabrosa.
Hecha de maíz, es perfecta para rellenar con todo tipo de ingredientes.
Desde la tradicional Reina Pepiada (pollo con aguacate y mayonesa), hasta una simple pero deliciosa arepa rellena de jamón y queso, esta maravilla es perfecta, hasta sola, como acompañante para cualquier comida, como por ejemplo, un pabellón.
Lo interesante de la arepa es que, al igual que otros platos, comparte una similitud con otras comidas de América Latina, como las pupusas en El Salvador o las gorditas en México.
Cada versión tiene su toque especial, pero todas comparten una misma base de maíz, lo que nos recuerda que, aunque tengamos nuestras diferencias, en la comida encontramos un punto común.
PAN DE BONO: Una explosión de sabor colombiano
Por supuesto, no podemos hablar del Mes de la Hispanidad sin mencionar el pan de bono colombiano.
Este pancito suave y esponjoso, hecho con queso y harina de yuca, es ideal para acompañar un buen café o disfrutarlo solo.
En Colombia, el pan de bono es una tradición que acompaña los desayunos y meriendas, pero su popularidad ha crecido tanto que ya se encuentra en muchas otras partes del mundo, incluyendo aquí en los Estados Unidos.
EMPANADAS: una receta que cruza fronteras
Si hay un plato que tiene tantas versiones como países, esas son las empanadas.
Por ejemplo, en Venezuela, las empanadas se hacen con masa de maíz y se rellenan con todo tipo de delicias, desde carne mechada hasta queso o pabellón.
En Colombia, las empanadas son pequeñas, crujientes y también están rellenas de carne, pollo o papa.
Y claro, no podemos olvidar las famosas empanadas argentinas, que son un ícono del sur de nuestro continente.
Estas empanadas están hechas con masa de trigo y suelen rellenarse de muchas formas, aunque una de las más populares es la que lleva carne picada, cebolla, huevo duro y aceitunas.
Cada país tiene su forma especial de preparar empanadas, pero lo bonito es que, en esencia, todos compartimos esa costumbre de disfrutar un bocadillo relleno, fácil de comer y lleno de sabor.
COMER CON LAS MANOS, una tradición compartida
Algo que he aprendido es que, en la mayoría de los países hispanos, comer con las manos es muy común.
Desde los tequeños hasta las empanadas, pasando por las arepas y el pan de bono, todos estos platos son ideales para disfrutar sin cubiertos.
Comer con las manos nos permite saborear mejor los alimentos y disfrutar de una conexión más cercana con nuestra comida.
Además, muchos de estos platos son perfectos para compartir en reuniones, donde todos podemos saborear pequeñas porciones de lo que más nos gusta.
Y es justamente ahí donde radica la belleza de nuestra cocina hispana: en la convivencia, el compartir y el celebrar juntos nuestras tradiciones a través de la comida.
UNA CELEBRACIÓN CON SABOR
El Mes de la Hispanidad es un momento para celebrar nuestra cultura, nuestra herencia y nuestras tradiciones.
La comida juega un papel fundamental en todo esto, porque a través de los sabores compartimos nuestras raíces y mantenemos vivas nuestras costumbres.
Desde los tequeños venezolanos hasta las empanadas de distintos países, pasando por el pan de bono colombiano y las arepas, la gastronomía hispana es una deliciosa forma de conectarnos.
Probarla, es enamorarse de ella para los restos.
UNA CELEBRACIÓN CON SABOR
El Mes de la Hispanidad es un momento para celebrar nuestra cultura, nuestra herencia y nuestras tradiciones.
La comida juega un papel fundamental en todo esto, porque a través de los sabores compartimos nuestras raíces y mantenemos vivas nuestras costumbres.
Desde los tequeños venezolanos hasta las empanadas de distintos países, pasando por el pan de bono colombiano y las arepas, la gastronomía hispana es una deliciosa forma de conectarnos.
Probarla, es enamorarse de ella para los restos.
